

¿Sabías qué?
La herbolaria mexicana ha sido importante como remedio curativo de enfermedades por medio de plantas medicinales, volviéndose una tradición en diversos pueblos y una práctica común.
En México, el uso de plantas medicinales a través de la medicina tradicional es ancestral. Se utilizan las diferentes partes de la planta, según sea la afectación o la receta en cuestión. Lo más común es usar las hojas, las flores y esporádicamente el tallo o la raíz.
Las plantas medicinales se consumen directamente o pueden prepararse como infusiones o en presentación homeopática.

El uso de terapias complementarias, que incluyen los remedios con plantas, es una práctica común y continúa extendiéndose a nivel mundial. Los remedios con plantas se usan tradicionalmente en una variedad de presentaciones.
ARROZ
Tiene propiedades medicinales que han sido conocidas como las alimenticias desde tiempos muy antiguos, quizá desde que empezó a cultivarse esta planta hace 4 mil años en los países asiáticos. En ellos se ha empleado para curar inflamaciones intestinales, diarreas y disenterías: el agua de arroz cocido, que se bebe. También pueden usarse los granos blancos cocidos en agua sin sal, pues son astrigentes.


AVENA
La avena se conoce en el mundo desde el periodo neolítico.
Es una planta gramínea anual, herbácea de cañas delgadas de 1 metro de altura huecas y nudosas con hojas estrechas en forma de vainas líneales, puntiagudas y ásperas en su extremo.
Además de almidón, la avena contiene proteínas, minerales y vitaminas (especialmente las B y C), por lo que se emplea para prepara alimentos dietéticos medicinales.
JUGOTERAPIA
La terapia de jugos de frutas y verduras tienes sus bases.
Es importante cuidar el uso de las frutas en padecimientos cardíacos, renales y circulatorios por los minerales de sodio y potasio, así como de su contenido en azúcares o hidratos de carbono.


NOPAL Y SUS BENEFICIOS
El nopal se ha tomado como un alimento sagrado para muchas culturas por su gran cantidad de propiedades curativas, hidratantes y preventivas.
Gracias a que cuenta con todas estás características, ayuda con la prevención del cáncer y el proceso digestivo y circulatorio se ven beneficiados.
ACEITE DE SEMILLA DE TUNA
El aceite de semilla de tuna es rico en vitamina E, antioxidantes y ácidos grasos esenciales que lo hacen un aliado para el cuidado de la piel, uñas y cabello.
